Despues de tres dÃas viajando en Bolivia, Linda, Joost, Esther, Matt, Valerie y yo, llegamos a Uyuni. Despues de tres dÃas de
UNO, un terrible golpe en la cabeza con una maldita puerta, paisajes memorables, conversaciones en las que se evaporaba el vino, baches en una altitud excesiva (topando sobre los 4800 metros), hojas de coca, música compartida… el cansancio nos abarcó, asà como determinados sentimientos… demasiadas horas compartidas, demasiados juegos de avance y retroceso; una corta y decepcionante despedida, intensa en sus ojos, frustración.
Hice todo lo que pude, y más. Y lo harÃa. Nunca una oportunidad perdida. Tal vez, simplemente, no era el momento. Ni lo será.